sábado, 30 de noviembre de 2013

UNA NUEVA ETAPA  

El Gobierno distiende la pelea con el Grupo Clarín y aceptará su propuesta de división

Una vez aceptado el plan, el multimedios tendrá 30 días para dar a conocer a los nuevos dueños de cada unidad, que también necesitarán el visto bueno oficial. Cristina quiere evitar que vuelva a Tribunales.

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Armonia. La pelea entre Héctor Magnetto y Martín Sabbatella atraviesa un período de paz. Clarín frenó la embestida judicial y la Afsca aprobará su plan.
Armonia. La pelea entre Héctor Magnetto y Martín Sabbatella atraviesa un período de paz. Clarín frenó la embestida judicial y la Afsca aprobará su plan. | Foto: Cedoc Perfil
Los nuevos tiempos políticos que se desataron desde el retorno de Cristina Kirchner tras la licencia por enfermedad tuvieron sus efectos también en una de las principales batallas que mantuvo el Gobierno en los últimos años: la pelea con el Grupo Clarín entró en una etapa de tensa calma en la cual el plan de adecuación voluntaria se apresta a ser aprobado sin observaciones. El multimedios, por su parte, frenó la batería de presentaciones judiciales con la que pretendía trabar la actuación de la Afsca. Pero los cambios no terminan allí, sino que ahora las mayores complicaciones para el ente que conduce Martín Sabbatella aparecen en los planes de adecuación de los grupos que siempre fueron considerados más afines al Gobierno, como Telefe, Telecentro y Grupo Uno.
Fuentes de la autoridad de aplicación de la ley de Servicios de Comunicación Audiovisual aseguran que la decisión de la Presidenta es “que la aplicación no se vuelva a judicializar”. Y por eso hoy el equipo que conduce Sabbatella tiene más dificultades con algunos de los otros diez planes que faltan aprobar. La idea que transmitió el director del organismo en “no dejar huecos legales”. El problema reside en que si la Afsca aprueba tal cual están varios planes de adecuación, Clarín o algún otro podría presentarse ante la Justicia reclamando las mismas consideraciones. 
Desde el entorno de Sabbatella, de todas formas, desmienten que hubiera un cambio de política en relación con los grupos que fueron más amigables con el Gobierno. “Siempre se dijo que la ley se iba a aplicar con el mismo criterio para todos”, sostienen. Pero lo cierto es que las cuestiones que ahora la Afsca empieza a mirar con lujo de detalles antes parecían ignoradas. “El fallo de la Corte cambió todo. No podíamos estar a cara de perro con todos sin saber si Clarín finalmente se iba a adecuar”, argumentan.
Nuevos tiempos. Aprobarle el plan a Clarín implica acelerar los tiempos. La adecuación de oficio, que ya fue dada de baja, hubiese insumido mucho más tiempo, por lo menos hasta fines de 2014 (o más si se volvía a judicializar). Con la adecuación voluntaria, en Afsca se ilusionan con tener el nuevo mapa de medios definido a mediados de 2014. Antes Sabbatella quiere un nuevo triunfo político (el primero fue lograr que el Grupo presente un plan): que Cablevisión modifique su grilla y ponga a TN con el resto de los canales de noticias y no en el medio de dos canales de aire. Actualmente una medida cautelar frena su aplicación.
“El plan de Clarín es bastante correcto”, aseveró una fuente de la Afsca. El pedido de exenciones impositivas en el proceso de adaptación que pide el Grupo podría ser un inconveniente, pero no porque la Afsca no lo acepte, sino porque debe ser decidido por el Gobierno.
El objetivo de Sabbatella es que en la misma reunión del directorio (sería después del 10, cuando asumen los nuevos miembros) se aprueben los once planes de adecuación sin resolución. Y para eso deberán limar asperezas con grupos que desde la oposición se decía que eran beneficiados.
De Telecentro siempre se criticó que con una sola licencia prestara el servicio en casi todo el Gran Buenos Aires, algo a lo que la Afsca nunca hizo mención. Ahora, la entidad le avisó al grupo de Alberto Pierri que como mínimo deberá tener seis o siete licencias y ahí extenderlas, como marca la norma, a localidades linderas y de menor densidad poblacional. El problema, en ese punto, es que el decreto 1.225/2010 con el que el Ejecutivo reglamentó la ley estableció que se mantendrá la asignación territorial de las licencias con sus extensiones ya existentes.
Sobre Telefe, la Afsca siempre dijo que su problema era que con todos sus canales de aire superaba el límite de cubrir al 35% de los habitantes. Pero ahora se sumó otro reclamo repetido por opositores: la incompatibilidad de que Telefónica preste un servicio público y también de comunicación audiovisual. La empresa sostiene que Telefónica Argentina y Telefe pertenecen a Telefónica de España, pero que acá no tienen relación. Sabbatella repetía ese argumento sin cuestionarlo, pero ahora pidió que se lo estudie bien porque a la Afsca no le convence. La resolución de ese punto va a tener implicancias también en lo que pase con David Martínez si adquiere Telecom. El socio de Clarín en Cablevisión y circunstancial aliado del Gobierno, puede tener un argumento para quedarse con los dos negocios si Telefónica se queda con Telefe. Hoy la gente del magnate mexicano en Cablevisión es el puente de las negociaciones entre el grupo y la Afsca.

viernes, 29 de noviembre de 2013

Edi Zunino: "En el periodismo hay presiones, tensiones y berretines que llevan a la tentación de sentirse protagonista"

Edi Zunino: "En el periodismo hay presiones, tensiones y berretines que llevan a la tentación de sentirse protagonista"

En su libro, Periodistas en el barro, cuenta los enfrentamientos entre los referentes de la prensa; además, analiza la política comunicacional del kirchnerismo
Por   | Para LA NACION
 
Zunino reconstruyó los enfrentamientos que se dan en el seno del periodismo. Foto: LA NACION / Sebastián Rodeiro
 
La década kirchnerista no fue una más en la historia del periodismo argentino, que se vio signado y atravesado como nunca antes en los últimos años por discusiones, peleas y conflictos concebidos en lo más alto del poder político. Y que, en no pocos casos, alcanzaron niveles de escándalo y polémica que embarraron nombres y enterraron prestigiosas carreras profesionales.
Como si se tratara de un corresponsal de esta guerra mediática, Edi Zunino, jefe de redacción de la revista Noticias , se encargó de registrar desde su propia trinchera muchos de estos enfrentamientos que dejaron marcas a toda una generación de profesionales de la información. Y le dio a su parte bélico, formado por diez perfiles y cientos de anécdotas de los personajes de los medios más destacados de esta época, la forma de un libro que, a menos de un mes de haber sido publicado, ya alcanzó su segunda edición. En Periodistas en el barro (Editorial Sudamericana) el autor relata casos muy disímiles entre sí, que van desde el ascenso y virtual desvanecimiento escénico de Daniel Hadad -quien acordó no volver a aparecer en los medios hasta 2015- hasta los intentos de Jorge Rial de enterrar su pasado chimentero para transformarse en un referente de peso dentro del periodismo político de opinión.
Pero también este particular trabajo biográfico, narrado con trazos de múltiples géneros narrativos como el thriller policial, la novela negra psicológica y el reality show, sirve como disparador para "desmontar" muchos de los mitos creados alrededor de figuras centrales en los medios de la década K. Es el caso de la historia de Diego Gvirtz, el constructor y artífice de la llamada "trituradora" oficialista, o del papel central desempeñado por Marcelo Tinelli, quien este año logró influir en política desde el brillo de su ausencia. O también el de los caminos que tomaron las dos voces de Gustavo Sylvestre y Marcelo Bonelli, protagonistas del "divorcio" más resonante desde la recordada separación televisiva de Bernardo Neustadt y Mariano Grondona en Tiempo Nuevo . Y, por supuesto, incluye además los destinos inversos de Víctor Hugo Morales y Jorge Lanata, y la controvertida decisión de Horacio "El Perro" Verbitsky de ponerse completamente al servicio del gobierno de Cristina Kirchner tras haberse ganado la fama de periodista mordaz e independiente durante la década del 90.
Este es un gobierno que ejerce el poder con la lógica de los medios
Pero, por sobre todas las cosas, el autor destaca en su segunda obra (tras Patria o Medios , publicada en 2009) el modo en que se desdibujó en estos años la función social de todos estos protagonistas.
"Hay presiones, tensiones y berretines que llevan a la tentación de sentirse protagonista, gracias a la escena que ofrece el poder político, a jugar de Superman o Gardel. Por ejemplo, a Jorge Lanta desde el público le dicen y le gritan "Lanata Presidente"... y aunque él rechaza esto y señala que ese pedido no tiene nada que ver con la realidad, hay que sentir la presión del público pidiéndote eso: es algo que no resulta inocuo. El barro se pone tremendo", observa.
-¿Creés que la famosa "grieta" entre el país K y el anti K es, ante todo, una grieta entre periodistas?
-Es una grieta reproducida desde los medios, que proviene de la construcción de un discurso político que fractura entre blanco y negro, entre K y anti K, y la adaptación violentamente mansa de los principales referentes de nuestra profesión por ir tomando partido por uno u otro lado.
-Y en este contexto, ¿los casos de Víctor Hugo Morales y Jorge Lanata, que tratás en tu libro, son los más paradigmáticos?
-Se habla mucho, desde el antikirchnerismo de la llamada conversión de Víctor Hugo Morales, por haber pasado a ser uno de los más duros detractores del kirchnerismo a uno de sus más fanáticos defensores. Al mismo tiempo, a Lanata se lo acusa desde el otro lado por haber afirmado que jamás trabajaría en Clarín, para después haber terminado ahí. Pero son dos cosas diferentes: las experiencias de Víctor Hugo y Lanata pasan por distintos lugares, porque ante todo son personas con su propia relación concreta con su propia realidad, aunque sí son las grandes figuras que se han puesto en ambos polos del escenario. También hubo otros, claro, y no solo en esta época: algo parecido sucedió con el menemismo, aunque era diferente, porque Menem no tenía gente de su lado como Víctor Hugo, Horacio Verbitsky o un Diego Gvirtz. Ni, mucho menos, un Javier Grosman, el actual ministro del relato, que es un funcionario público que dirige esta unidad presidencial (la Unidad del Bicentenario). Desde ese ente se organiza toda esta puesta de escena, deshowbusiness , que es donde este "progre" puso a su servicio toda su experiencia en el sector privado, donde armaba los recitales a los que nos gustaba ir para escuchar nuestra música favorita,,,
 
En mi libro cuento cómo Cristina construye un personaje cada vez más ducho en el manejo de las cámaras, dice. Foto: LA NACION / Sebastián Rodeiro
 
-¿Imaginás una ola de conversiones de periodistas a partir de 2015, cuando Cristina Kirchner finalice su presidencia?
-Creo que en esto obra mucho la inmediatez, así como la toma de postura política. ¿Sergio Massa, acaso, nació de un huevo Kinder? ¿No fue jefe de Gabinete de este gobierno, no presentó la Ley de Medios en el Congreso, no fue el que aumentó la pauta publicitaria oficial 150 millones en un día, no fue el chupamedias caricaturizado por Tinelli como el político que iba detrás de Cristina con un secador de pelo en la mano y al grito de "la presiden-ta" con ese tonito tan propio? Massa dejó de ser todo eso porque pasó a confrontar con el kirchnerismo del que proviene, y se quedó sin historia, así, de repente. Y con Alberto Fernández fue lo mismo: de golpe se transformó en un clásico político moderno y honesto que no tuvo nada que ver con lo que pasó, aún cuando fue el primero que hizo un manejo discriminatorio de la pauta oficial y otras decisiones importantes. Con esto quiero decir que los periodistas les sacamos la historia a las personas, y terminamos de contarlas en función de lo que nos interesa a nosotros. Y los alineamientos y realineamientos de los periodistas se dan en este sentido. Mi sensación es que la crema del sistema político tiene la misma política que los Kirchner: la Ley de Medios es legal gracias al apoyo de los tres poderes del Estado... por eso yo quiero ver cómo el próximo gobierno va a controlar la caja y cómo construye su relación con los medios. La técnica de "convencer, o comprar, o matar" no es un invento de los Kirchner, aunque, por supuesto, la aplicaron de manual.
-¿En qué cambiaron a los medios los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner?
El país está partido en dos agendas políticas diferentes, en dos relatos completamente distintos de la realidad
-Este es un gobierno que ejerce el poder con la lógica de los medios, ante un periodismo que reacciona con la lógica de la política. es decir, que se embandera con el oficialismo y la oposición. Y el del oficialismo y la oposición es, en realidad, un territorio ajeno al del periodismo y la información. Pero el país está partido en dos agendas políticas diferentes, en dos relatos completamente distintos de la realidad: ya no estamos teniendo puntos de vista sobre tal o cual medida, sino que estamos viendo de diferente manera a los hechos. Un cenicero es un cenicero, y un teléfono es un teléfono: no es una cuestión de fe, pero hoy vivimos así...
-¿Qué impresión te dejó la reaparición de la presidenta en la escena pública? ¿Crees que estuvo cuidadosamente preparada?
-La construcción deliberada del mito Kirchner, y la construcción deliberada de Cristina como diva de la televisión han sido dos temas estratégicos como modo de ejercer el poder por parte del kirchnerismo. Curiosamente, Cristina reaparece y se re-presenta dos días después de que, en ocasión del Día de la Militancia, la plana mayor kirchnerista hace un acto en el que se presenta el documental de Kirchner. En la secuencia del relato, que está separado entre parte y parte solo por algunas horas, tenemos la representación del mito Kirchner y la reaparición de Cristina, que además aparece despojada del luto.
-¿Por qué crees que la Presidenta eligió esta semana para dejar atrás su etapa luctuosa?
-Ella avanza hacia una nueva versión, como si volviera de una batalla que la desgajó... y, de alguna manera, un problema de salud es eso. Ningún mito, ninguna representación puede construirse con efectividad si no hay una buena dosis de algo cierto detrás. Y aquí lo cierto es que estuvo enferma, que fue invadida en su físico. Es una persona a la que le agujerearon la cabeza y la estudiaron de todas las maneras posibles, y lo van a seguir haciendo por su problema cardiológico, que es leve pero que necesita seguimiento. Cristina estuvo deprimida, lo que es común en pacientes que están siendo sometidos a tantos estudios, y en ese contexto el equilibrio emocional de una persona no es el mismo que el de otra a la que no le pasa nada. Ella, además, tuvo miedo y supo que es finita.
-¿Creés que la salida del luto fue calculada, planificada?
Cristina avanza hacia una nueva versión, como si volviera de una batalla que la desgajó
-En el kirchnerismo todo se edita, todo se teatraliza de acuerdo a los avances de la tecnología: las redes sociales, la televisión, la imagen en general. En este contexto, Cristina reaparece esta semana con este aura de humanidad y del pase del luto al blindaje de la piedad. Ella se pone como un igual a nosotros, que ha tenido un problema y a la vez sale rodeada de objetos que apelan a la sensibilidad directa, como el peluche y el perrito que mostró en el video, sumado a la hija detrás de cámara. Todo el ambiente es sensible. y todo ese genera un aura, un blindaje de piedad que en mi opinión va a ser, desde el punto de vista político, muy importante de seguir para saber cómo viene la mano ahora.
-¿Te sorprendió que la Presidenta eligiera este momento de su gestión para salir del luto?
-No. Tres años de luto ya hacían que esa etapa pasara a tener una connotación negativa desde el punto de vista del análisis político. La sensación ya era de un estirado uso político del luto. No sabíamos cómo iba a ser esta salida, pero la oportunidad era esta. La construcción es deliberada y planificada: los Kirchner tomaron como propia la lógica de los medios, y es desde ahí donde hacen política. Incluso su lógica binaria, la del bien y el mal, tiene mucho que ver con la inmediatez de la televisión, donde el vértigo propio de ese medio de comunicación nos conmina a pronunciarnos por sí o por no. No hay tiempo para demasiado más, ni lugar para los grises, que espantan audiencia... y los Kirchner han sido grandes constructores de audiencia.
-¿Cuál fue la clave para construir esta audiencia?
-Lo hicieron desde los medios públicos, la cooptación de los medios privados, la confrontación con los medios privados que no controlaron y, también, desde el uso anticipado y moderno de las redes sociales. Fueron los primeros en hacerlo... y por eso también me parece cuestionable en este punto al antikirchnerismo, que no ha visto este fenómeno. Lo que ha pasado con el kirchnerismo y la juventud a partir de las redes sociales es un fenómeno que hay que tener en cuenta, y que creo que va a perdurar más allá de la gestión de Cristina. Hay un mundo en las redes sociales, y que está fuera de los medios tradicionales, que va a seguir ahí.
Creo que se parecen los Menem y los Kirchner, sobre todo en la ambición por manejar el discurso público
-¿Qué importancia le da la Presidenta -y su entorno- a la escenificación de sus apariciones públicas?
-En mi libro cuento cómo Cristina construye un personaje cada vez más ducho en el manejo de las cámaras, cada vez más ducho en el manejo de los climas y de los tiempos, cada vez más ducho en el manejo del personaje público... y esta versión del personaje no viene con la espada, sino con perrito y peluche. Quiere inspirar ternura y piedad, y con esto busca darle un mayor privilegio a la sensación de gobernabilidad, un apelar al "dejen gobernar a esta señora que viene averiada", muy por encima de los efectos que puedan tener tales o cuales medidas económicas que puedan tomarse. Lo que importará en estos dos años que quedan de mandato no es tanto el modelo económico sino el modelo desde el punto de vista de la conducción política. Cuando los recursos son escasos y las medidas pueden resultar antipáticas, todo eso puede reemplazarse por símbolos. El pueblo argentino las vivió todas: sabemos lo que es una crisis y lo que es una carencia, la carestía... de modo que uno puede o bien sublevarse a eso, o bien tolerarlo porque hay una situación superior que nos obliga a transitarlo con tranquilidad. Y esta mujer rodeada de un aura piadosa nos acerca más a lo segundo que a lo primero.
-¿Cuáles son los puntos de contacto en la política de medios del menemismo y el kirchnerismo?
-Creo que se parecen los Menem y los Kirchner, sobre todo en la ambición por manejar el discurso público. La diferencia es que Menem fue a la confrontación con Clarín desde una estrategia de guerra convencional: trató de armarle un ejército igual, a través del CEI -con Moneta, los Werthein, Telefónica- para oponerle al ejército clarinista. Los Kirchner, en cambio, jugaron a la guerra de guerrillas, no por su setentismo, sino por la factura de cómo lo hicieron: agarraron el multimedio del Estado y lo reorganizaron en función de su discurso. Y empezaron, por separado, a tener periodistas y medios periodísticos que bajaban y manejan la misma línea informativa. Del otro lado terminó poniéndose Clarín, que fue el gran aliado de la primera mitad de la etapa kirchnerista, claro. Pero en cuanto a su relación con los medios de comunicación, el kirchnerismo se planteó lo mismo que el menemismo, aunque los Kirchner fueron mucho más efectivos. Los Kirchner generaron un kirchnerismo cultural desde el discurso, mientras que el menemismo cultural se basaba en la economía. Menem se apoyó, en este sentido, en el dólar, a diferencia de los Kirchner, que se apoyaron en los medios..

Es Ley la Radio y TV Santafesina

Es Ley la Radio y TV Santafesina

El Senado provincial dio sanción definitiva a varia leyes y modificó algunas que volverán para para ser tratadas hoy en la última sesión ordinaria de la Cámara de Diputados.

La Cámara de Senadores convirtió en Ley el proyecto de creación de la Empresa de Radio y Televisión Santafesina. La iniciativa tuvo modificaciones en Diputados donde se incorporaron un mayor porcentaje a las producciones locales y se establece que la empresa podrá contar con empleados públicos y privados. La ley obtuvo sanción definitiva poniendo un límite a las aspiraciones de Rubén Galassi de iniciar las emisiones por decreto. Ahora el Ejecutivo tendrá que reglamentar la ley, nombrar dos directores y pedir al Poder Legislativo la designaciones de los cuatros directores para redactar el manual de procedimientos y normativas para la nueva empresa. También se deberá constituir la Comisión Bicameral de Seguimiento y el Concejo Consultivo. Todo esto durante extraordinarias si el gobierno quiere iniciar sus transmisiones en marzo del 2014.-
Mucho tuvieron que ver las organizaciones sindicales de SAT-SAID, locutores, operadores de radios, espectáculos públicos y la cámara Independiente de Productoras de Contenidos que durante dos años y medios lucharon para que la Señal Santafesina salga por Ley.
También fue ley el proyecto de Ley de Avelino lagos sobre los trasplantados y volvió a Diputado el proyecto de Ley de los combatientes de Malvinas porque tuvo modificaciones que fueron aprobados por la mayoría de los ruidosos presentes en la explanada de la Legislatura. Se tratará hoy en la última sesión de Diputados.-

 Ley la Radio y TV Santafesina

jueves, 28 de noviembre de 2013

Después de Metegol, la industria de los dibujos animados va por el despegue

Después de Metegol, la industria de los dibujos animados va por el despegue

El cine de animación local quiere aprovechar el impulso de la película de Campanella. En este momento, los dibujitos son casi el 3% de la producción local. La apuesta es a exportar y producir para todos los dispositivos. 

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Después del éxito en taquilla del film Metegol de Juan Jose Campanella, el cine de animación local busca aprovechar el buen momento del sector y consolidarse. Según el último informe difundido por el SICA (Sindicato de la Industria Cinematográfica Argentina) en lo que va del año, las producciones nacionales de animación constituyeron el 2,94% del total de las producciones realizadas por el cine argentino y a diferencia del año anterior, hubo dos títulos de este tipo en cartelera: Metegol de Campanella y Juan y Yastay de Pedro Biemenbaum.  
El primer caso constituyó un claro impulso a la industria nacional por tratarse de la primera película en incorporar tecnología 3D y fue el factor decisivo para que entre todos los géneros la animación resulte el género más rendidor en la boletería con $ 385.924.173 millones de pesos recaudados y más de 12.947.422 millones de espectadores.
Al respecto del impulso que dio a la industria el éxito de Metegol, Rosana Manfredi, una de las organizadoras de Expotoons, la exposición internacional de cine de animación que se llevó a cabo en el Centro Cultural San Martín, analizó el fenómeno: "Queremos tener cada vez más producciones de animación de buena calidad que se exporten para generar divisas, hemos tenido mesas muy interesantes en el festival con distintas personalidades. En general, los festivales en todo el mundo son mercados, lugares de encuentro, en este caso, en Expotoon tuvimos una mesa del foro latinoamericano de la que participaron productores y directores de Chile, Brasil y Argentina que hablaron del crecimiento de los tres países y en general de toda América Latina que creció y mucho este año", explicó Manfredi a Tiempo Argentino.
Hubo un antes y un después de Metegol y ya no sólo debido a su éxito local, sino a raíz del éxito que sigue cosechando a través del mundo, ya que gracias al film "la Argentina tuvo una presencia fundamental dentro del mercado de animación más importante del mundo en Cannes, donde se comercializan los principales films, allí fuimos con una delegación muy grande, con muchos proyectos, se abrió una puerta, un desafío para la industria. Y como este crecimiento se viene dando en la región en general, surgió la idea de armar un foro donde podamos acercarnos todos los actores y decidir de qué modo organizarnos tanto productores, directores, como cámaras empresariales". 
En esta línea destacó la necesidad de formar alianzas porque: "Individualmente, para la industria, somos pequeños. Buscamos que un producto hecho en Argentina se pueda difundir en otras pantallas, que la televisión local, a partir de la Ley de Medios, emita productos latinoamericanos y viceversa, que ellos emitan productos nuestros, en un ida y vuelta mutuo, eso ayudaría mucho al cine de animación."
En cuanto al rol del Estado en la difusión del cine de este género, Manfredi explica que no se trata de que financie los proyectos, sino que se estimule la difusión en festivales a nivel internacional y destacó que el Instituto Nacional de Cinematografía (INCAA) lance constantemente concursos, uno de los últimos para el piloto de una serie de animación inédita, en la que se presentaron 90 proyectos y ganaron diez. Los premios fueron de hasta $ 180 mil pesos. "Ese tipo de concursos de incentivos, años atrás no existían", afirma.
Pero el empuje de la animación no sólo se da a nivel cinematográfico, sino también es un auge que incluye a los canales de televisión para niños tanto internacionales, como Cartoon Network o Paka Paka a nivel local.
Al respecto, Daniela Vieira, directora de contenido de Cartoon Network con sede en Brasil, explicó que: "El sector de animación para niños viene creciendo con fuerza en Latinoamérica desde hace cinco años en términos de desarrollo de la complejidad de las historias y de las técnicas, pero a su vez, el mercado en general está cambiando. En Argentina se pasó de ofrecer productos de contenidos educativos, a contenidos que pueden ser adquiridos por cualquier canal internacional", sostiene. 
El perfil de los proyectos que hoy busca el famoso canal de animación son, principalmente, series de 11 a 7 minutos, hasta largometrajes de 3 horas, pero lo más curioso resulta en cómo ha cambiado en los últimos años la forma en que los más chicos ven dibujos animados. Vieira explica: "Millones de chicos visitan nuestro sitio web y se hacen su avatar. Nuestro sitio es dinámico e incluye ofertas para tablet, celulares y contenido multipantalla." Años atrás el proceso de animación para niños funcionaba a la inversa: a partir de una serie famosa se inventaba un contenido con compatibilidad para tablets y celulares, pero lo que tenía más peso era el contenido del canal, esa tendencia fue cambiando: "Hoy los chicos 'cartoon' –aquellos de un rango de edad que va de 7 a 11 años– juegan y manejan el celular y las tablet de papá y mamá y todo el contenido del canal debe estar disponible para ellos en formato multipantalla", concluyó.  «
 


rompió redes y taquillas
En el día de su estreno, el pasado 18 de julio, en plenas vacaciones de invierno, la película Metegol del director Juan José Campanella, fue vista por 102.867 espectadores en 256 pantallas de todo el país y quedó posicionada como el mejor arranque de la historia de una película argentina, superando incluso al tanque hollywoodense de animación Mi villano favorito 2 que se estrenó el mismo día. En tan solo diez días de exhibición, Metegol superó el millón de espectadores. El fenómeno siguió. Ya a mediados de septiembre alcanzó los 2 millones de personas, según especificó la consultora Ultracine. Todo un suceso para uno de los films argentinos más caros de la historia (costó 20 millones de dólares) pero a la vez uno de los más baratos comparados con las cifras de los tanques estadounidenses que no bajan de los 100 millones.



Variedad
Expotoons optó por no dejar afuera ninguna temática. Exploraron tópicos como transmedia, desarrollo de guión, stop motion, videojuegos, coproducción, animación 3D, pitching, técnicas clásicas y nuevas tecnologías.

miércoles, 27 de noviembre de 2013

| Bernarda Llorente, productora y periodista

"Sufrimos 32 allanamientos: en uno vino el hijo de Videla"

Inició su adolescencia en la clandestinidad, se exilió en España y en  México, y regresó exactamente siete años después: "No volví a reconstruir mi identidad hasta no volver a mi país." Es una de las responsables de Televisión por la Identidad: "Fue una elección que rompe la lógica de la industria."

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Hija de una abogada laboralista y de un ingeniero y profesor universitario, Bernarda Llorente inició su adolescencia en la clandestinidad. Luego de años de persecución y de contar –sabe el número exacto– 32 allanamientos en su casa, en San Rafael, Mendoza, su madre junto a ella hallaron refugio en Buenos Aires, hasta exiliarse primero en España y luego en México.
Bernie dejó su casa familiar con el propósito de salvar a su madre, Susana Sanz, que se había convertido en una líder política y regresó luego de siete años de exilio, exactamente  el mismo día calendario que había cruzado la frontera pero en sentido contrario. "Cinco de octubre de 1984", señala sobre el día marcado en su historia. 
Llegó convertida en periodista, sin DNI, con el pecho hinchado de anhelo por recuperar su identidad y con un claro propósito de luchar a favor de los Derechos Humanos. "No volví a reconstruir mi identidad hasta no volver a mi país, no iba a poder terminar un proceso si seguía mi vida afuera. Me iba a quedar truncada la vida", manifiesta y revela, de a poco, parte de su pasado que mantuvo en privado.
Reconocida por su trabajo junto a Claudio Villarruel, inicialmente en Telefe y ahora con OnTV, en las tres décadas de democracia, sumó una licenciatura en Ciencias Políticas y dedicó su trabajo en los medios "a aportar en la construcción de la ampliación de márgenes democráticos". Durante los diez años al frente de Telefe impulsó ficciones con anclaje social como Montecristo, Vidas Robadas, Resistiré, Ver para leer, Ser urbano y el ciclo de TV X la identidad, que luego extenderían con TV X la inclusión y, la próxima a estrenarse TV X la Justicia. "Democratizar los medios es también poder generar contenidos que estimulen a pensar la realidad de una manera diferente", sentencia. Ofrece un café, y durante una hora acepta la invitación de olvidar su discreción para repasar en voz alta cómo fue su arribo a la adultez y su recorrido en estos 30 años de democracia. "La historia vale contarla públicamente en función de otros", explica sobre su decisión de no haber hablado en detalle nunca antes sobre aquellos sucesos que la definieron como la mujer y profesional que hoy es.
–¿Qué recuerdo tenés del 24 de marzo de 1976?
–Tenía once años e iba a la escuela pública. Me acuerdo haberme levantado para ir al colegio y escuchar los comunicados. Me acuerdo de la cara de mi padre diciendo a las siete de la mañana: "¡Se pudrió todo!¡Otro golpe!"
–¿Qué sucedió con tu familia a partir de ese día?
–Había empezado mucho antes. Muchas veces fueron a mi casa comandos de la Triple A a secuestrar a mi madre, pero por esas fortunas del destino no la encontraron. Hacia fines de 1974,  tuvo que irse de mi casa y pasó a la clandestinidad. La persecución ya era muy grande. En mi memoria infantil el golpe es como que terminó de definir las cosas. Mi madre era abogada laboralista, terminó siendo una líder política. La persecución a los militantes empieza mucho antes. Cuando muere Perón es un hito definitivo y empieza a escribirse esta historia negra que terminó en el golpe y después se profundiza, aparecen nuevas figuras como son los desaparecidos y cosas propias de la etapa. 
–¿Cuánto entendías vos y cuánta información manejabas con respecto a la situación de clandestinidad de tu mamá? ¿Te advertían que no hables?
–Sí, obviamente. Tengo una hermana mayor, Mariana. Las dos éramos muy conscientes de lo que significaba. Mi madre se había tenido que ir de mi casa muchas veces por algunos días. Antes del '73, había razzias, mi mamá se iba pero en dos o tres días volvía. Hasta que un día me dijo que tenían que irse y yo le respondí: "No hay problema, son sólo unos pocos días." Pero esa vez, mi madre me miró y me dijo que iba a ser mucho tiempo. La visitábamos en plena clandestinidad. Teníamos que tomar muchas medidas de seguridad. Éramos muy conscientes del riesgo que corría. Una de las imágenes que tengo de mi infancia, antes del golpe y después también, era que venía el diariero con una bocina y una bicicleta a entregarte el diario y había una situación implícita donde los tres nos mirábamos con mi padre y mi hermana y queríamos agarrar primero el diario. Eso ocurría todos los días. Era una situación sin palabras, pero estaba todo dicho.
–¿Qué esperaban en el diario?
–La tranquilidad de que no existiera la mala noticia. No estábamos esperando la noticia que mataron a mi madre sino justamente era el alivio que el diario no nos diera la noticia que rondaba, y que sabías que era posible.
–Finalmente se fueron a España.
–Estuve un año en Buenos Aires y en la clandestinidad. Fui a un colegio de monjas que me aceptaron sin pasar mi nombre verdadero al Ministerio de Educación. 
–¿En la lista de alumnos, eras Bernarda?
–Para mis compañeras era Bernarda pero contaba toda una historia distinta de por qué estaba en Buenos Aires y mentía donde vivía. Antes de venir con mi madre a Buenos Aires se había desatado una gran represión en Mendoza. A mi padre lo echaron de todos los empleos, era ingeniero y profesor universitario. Y él tuvo la estrategia de decir: nos quedamos acá, en un lugar conocido y entre la familia. Mis padres eran figuras importantes del pueblo. Hubo un costo en la resistencia, como las fuerzas de seguridad en ese momento no estaban coordinadas, sino que cada una defendía su propio espacio, recuerdo hasta que llegué a Buenos Aires fueron 32 allanamientos.
–¿En tu casa?
–Sí, en mi casa familiar. Iban de fuerzas de Buenos Aires, más policía de Mendoza, iban de los destacamentos del ejército, la marina de Buenos Aires, de la Federal de Buenos Aires. Incluso en uno de los allanamientos vino el hijo de Videla que era un teniente jovencito. No había una coordinación. Mi madre, no sé por qué, a lo mejor por ser mujer, era como una especie de figura codiciada.
–¿Vienen con tu hermana a Buenos Aires?
–No. Mi hermana en este pacto implícito decide quedarse con mi padre, no queríamos abandonar a nuestros padres. Hay un momento en la vida en que los hijos se vuelven "protectores" de los padres.
–¿Vos viniste a Buenos Aires con esa idea? ¿Que era más seguro para vos y tu mamá?
–Yo venía con la idea de salvar a mi madre. Esas ideas que uno puede tener a los doce años. Me pareció que era el cable a tierra, me pareció que no era una situación donde mataban a todo el mundo.  Finalmente era como una posibilidad para mi madre, salvarla, pensé que tenía que salvarla.
–¿Terminaste el secundario ahí?
–No. No sé qué pasó con esa monja. La rectora de esa escuela desapareció. Yo fui durante el '77. Vivíamos en Recoleta y tomaba un colectivohasta Floresta, lo tenía que tomar como a las 6 de la mañana y yo entraba a las 7. Mentía donde vivía pero viajaba mucho. A veces coincidía que cuando estaba en la parada, venía un patrullero que dejaba a dos tipos, que eran de la comisaría de Las Heras. Esos tipos hablaban lo que habían hecho durante la noche y de los detenidos que tenían.
–¿Qué contabas en la escuela?
–Que vivía con una tía que había venido porque tenía problemas en la columna y estábamos haciendo un tratamiento. Que esa tía se llamaba Nené. Vivíamos con el padre de un amigo que había alquilado la casa como cobertura. Ni siquiera esa persona sabía que mi madre era mi madre, pensaba que era mi tía. Durante un año nunca la dije mamá a mi madre.
–¿Incluso en la intimidad?
–Si estábamos solas, sí. Pero si aparecía otra persona nunca se me escapó mamá, que es una palabra muy básica. 
 
Desde finales de 1977 hasta 1980 Bernarda Llorente vivió con su mamá y su hermana en España, luego pasaron a México hasta 1984. Recuerda claramente el 30 de octubre de 1983. "Nos juntamos muchos argentinos  que estaban en México y a través de una radio de onda corta agarrábamos Radio Nacional, creo que era Radio Nacional,  y escuchamos el resultado de las elecciones."
–¿Y qué significación tuvo ese día para vos?
–Cuando era chica fui muy consciente que tenía que volver a la Argentina. Necesitaba reconstruir la identidad y cualquier otro camino que tomara me iba a coartar la posibilidad de reconstruir mi identidad. Mi identidad estaba muy ligada a este país. Seguía viviendo como argentina, leíamos diarios viejos como si fueran nuevos y mi identidad siempre mantuvo un compromiso con los Derechos Humanos.
–¿Qué día volviste a Argentina?
–Volví el mismo día que me había ido, siete años después. El 5 de Octubre de 1984. En realidad no podía volver porque no tenía DNI, tuve que hacer todo un trámite de excepción y además era menor de edad. Necesitaba unos permisos y autorizaciones. Voté por primera vez en el '87. De chica, como autodidacta, me había hecho periodista porque me habían ofrecido un trabajo, ya vine con esta profesión. En la Argentina estaba Sergio Sinaí, con quien había trabajado en México y con él empecé a trabajar en Editorial Perfil.
–¿Qué es para vos la democracia?
–La democracia tiene distintas etapas, hubo transiciones. Arribamos a una democracia mucho más débil y más endeble. Una democracia en donde la gente todavía tenía muchos temores y mucha incertidumbre. La democracia era como una bocanada de aire donde se recuperan muchas cosas perdidas, pero el escenario fue incierto por la cantidad de amenazas que hubo en contra de la democracia. Por un lado uno tenía muchas expectativas que con la democracia todo se solucionaba, está la famosa frase de Alfonsín, esos siete años de dictadura no habían sido en vano. Esta sociedad se había transformado en términos muy profundos. Era una sociedad fisurada social y políticamente, no sólo había pasado la represión sino un plan económico que había destruido la base de esos cimientos de esa Argentina que había tenido el peronismo, de una unidad social. La democracia fue mostrando sus límites en algunas cosas, pero al mismo tiempo fue pasando pruebas de fuego que la fueron consolidando. 
–¿Cómo estamos a 30 años?
–Lo más cercano que uno puede imaginar a lo que es la democracia en un proceso perfectible. La democracia no es sólo poder acceder al voto, no sólo poder elegir representantes, sino que está ligada ala participación ciudadana, cuál es el papel de los ciudadanos y cuán inclusiva es esa democracia. La gente tiene mucho más expectativas de ser protagonista de una serie de cosas. 
–¿El desarrollo de tu carrera como realizadora que incluye series de Televisión X la identidad, es un ejemplo de una democracia consolidada?
–Con Claudio Villarruel decidimos romper la lógica que había imperado hasta ese momento en la televisión abierta, de sólo tocar determinados temas del pasado a través de documentales o noticieros. A partir de un compromiso básicamente personal que tenemos con la realidad, pudimos unir el trabajo con lo más profundo de nuestra conciencia . Eso es un privilegio que uno tiene que pelear, ganar y arriesgar; no es gratuito. Fue una elección  que rompe la lógica de la industria como negocio para atarse a las reglas del corazón, la conciencia y el compromiso. Y hay toda una camada de gente que no sólo apuesta a hacer una televisión distinta, sino que también imagina una realidad diferente. Más de diez nietos fueron recuperados y cuando tu trabajo profesional se amalgama de esa manera con la realidad, la televisión cobra otros sentidos.  «
 
 
Por qué Bernarda Llorente
Por su decisión de trabajar en pos de los Derechos Humanos, realizando en televisión abierta de historias de ficción  que contribuyeron a la restitución de identidades. Por primera vez detalla la experiencia familiar ante la persecución sufrida por su madre, Susana Sanz, a quien buscaron en 32 allanamientos en su casa en San Rafael, Mendoza. Durante la resistencia, vivió un año de "clandestinidad" en un colegio de monjas en Buenos Aires, hasta exiliarse y regresar en 1984, cuando trabajó en Derechos Humanos, con Augusto Conte,en el Consejo de la Mujer y en el CELS, hasta dedicarse a su trabajo en los medios.
 
 
Memoria por tv abierta
La imagen que ilustra la vida en democracia está directamente relacionada a su trabajo y el compromiso con la defensa de los Derechos Humanos. "Haber podido hacer en la televisión abierta un programa que hablara sobre la historia de los nietos recuperados (Televisión por la identidad), y antes haber podido hacer Montecristo, es un ícono de la consolidación definitiva de la democracia en la Argentina. A través de ambos programas muchos padres e hijos se pudieron sentar a charlar lo que había pasado durante los capítulos más negros de nuestra historia. Y todo eso posibilitó también que varios nietos se acercaran a Abuelas con la decisión de enfrentar la verdad. Las protagonistas de estos 30 años son las Abuelas y las Madres y también son los militantes que resistieron, los que no renunciaron a sus convicciones. Una parte muy grande de esta sociedad es también protagonista importante en la posición de decir:  'Nunca más vivamos esto.' Todo eso fue construyendo esta cultura democrática que hoy tenemos."